EL PODER
EL PODER
«EDUARDO GALEANO»
Eduardo Germán Hughes Galeano, nace en Montevideo el 3 de septiembre de 1940. En él conviven el periodismo, el ensayo y la narrativa, siendo ante todo un cronista de su tiempo, certero y valiente, que ha retratado con agudeza la sociedad contemporánea, penetrando en sus lacras y en sus fantasmas cotidianos. A los 14 años entró en el mundo del periodismo, publicando dibujos que firmaba «Gius», por la dificultosa pronunciación castellana de su primer apellido. Luego empezó a publicar artículos. Se firmó Galeano y así se le conoce. Ha hecho de todo: fue mensajero y dibujante, peón en una fábrica de insecticidas, cobrador, taquígrafo, cajero de banco, diagramador, editor y peregrino por los caminos de América.
En las tierras donde nace el río Jurúa, el Mezquino era el dueño del maíz.
Cuando los demás le pedían un granito, se hacía de rogar. Si lo entregaba. lo entregaba asado, para que nadie pudiera sembrarlo.
Fue la lagartija, quien pudo robarle, por fin un grano crudo. Se deslizó, sigilosa, eludió a las serpientes y a las tarántulas que montaban guardia y se metió el grano en la boca, bien escondido detrás de la muela.
El Mezquino que tenia los granos contados uno por uno, advirtió enseguida la falta de uno.
Atrapó a la lagartija y le desgarró las manos y los pies buscando el grano de maíz. Por eso la lagartija tiene ahora, los dedos larguísimos y son puro dedo sus manos y sus pies.
Como el granito no aparecía, el Mezquino le abrió con tanta furia la boca que desde entonces la lagartija ha quedado con esas fauces enormes, que le nacen de las orejas. El Mezquino hurgó en la boca y no encontró nada. La lagartija se desmayo de dolor.
Cuando despertó era de noche. Pudo escurrirse, mientras el Mezquino dormía y nuevamente eludió a los centinelas. Al amanecer escupió el grano en la tierra de todos. Poco tiempo después, todos participaron de la cosecha.
El Mezquino también era dueño del fuego y se negaba a convidar.
Nunca entregaba un tizón, sin sumergirlo, antes, en el agua.
Un día, el lorito se metió volando en la chacra prohibida.
Se posó sobre una rama y se puso a llorar. Lloraba a grito pelado. El Mezquino le tiraba cuanta cosa tenia a mano y el lorito esquivaba los proyectiles.
_Fuera de aquí. Vete a chillar a otra parte!.
Pero el lorito lloraba cada vez más estrépido.
Fue entonces que el Mezquino le arrojó un tizón encendido.
Era lo que el lorito estaba esperando. Aferró el tizón con su pico que era enorme como un pico de tucán, y huyó por los aires. Voló y voló a toda la velocidad de sus alas, perseguido por una estela de chispas en el cielo. La brasa avivada por el viento, le iba quemando el pico y lo hacia sufrir, pero el lorito no se detuvo.
Mientras tanto el Mezquino batió su tambor mágico y desencadenó un diluvio.
El lorito ya había llegado al bosque. Alcanzó a poner el tizón candente en el hueco de un árbol, lo dejó al cuidado de los otros pájaros y voló a mojarse bajo la lluvia violenta. El agua le alivió los ardores pero perdió así gran pico para siempre. Por eso el lorito tiene el pico curvo y corto; y si se mira bien, se puede ver la quemadura blanca alrededor de los ojos.
Todos los pájaros cubrieron con sus cuerpos el fuego robado.
Los que más cerca estaban del tizón son los que han quedado con el plumaje rojo. Los del plumaje negro solo recibieron solamente humo.
TALLER
1. Contesta el siguiente crucigrama según la lectura anterior:
http://dl.dropbox.com/u/21564854/EL%20PODER.htm
2. ¿Crees que en el mundo hay gente mezquina? explica la respuesta
3. ¿Quién descendió del sol a la tierra?
4. ¿ Para qué descendió?
5. De quién era hijo Bachué?
6. ¿Cómo descendió el dios?
7. ¿Qué aprendió la comunidad con el tiempo?
8. ¿Para qué partió la comunidad?
9. ¿De qué comunidad se está hablando en este video?
10. Cuál era el lugar de origen de Bachué?